El Festival del queso rodante…Sí, has leído bien.
Seguramente has oído hablar sobre los estereotipos y las costumbres inglesas, ¿verdad que te imaginas a los británicos como personas sumamente, tranquilas, sensatas y educadas? Pues hoy te vamos a contar cómo los ingleses pueden volverse realmente locos por un queso.
El Festival del queso rodante no solo está considerado uno de los eventos más raros de Gran Bretaña, sino también uno de los más bizarros del mundo.
Incluso tiene su propia película. Chis Thomas, un director de cine de Londres, creó un cortometraje llamado Let`s Roll sobre esta excéntrica tradición.
Está calificado como un deporte extremo, por lo que únicamente está recomendado para los muy valientes (o incluso dementes 😉). ¡Ojo, esto tiene mucho mérito si consideramos que existen deportes como el extreme ironing!
¿Y tú qué, te atreverías a participar? ¿Hasta dónde llegarías por un queso? Te contamos todo lo que necesitas saber.
💡Tabla de contenidos 📝
¿Qué es el Festival del Queso Rodante, cuándo y dónde se celebra?
El festival del queso rodante, cuyo nombre original en inglés es Cooper’s Hill Cheese-Rolling and Wake, es un evento anual que se celebra el último lunes de mayo (día festivo para los británicos) en Cooper’s Hill.
Es una colina situada en el pueblo de Brockworth, cerca de Gloucester, a 40 minutos de Oxford(Inglaterra). Aunque es se trata de una festividad local, con el paso del tiempo ha ganado fama internacional y hoy cuenta con miles de visitantes anuales.
De hecho, en la actualidad este festival también se celebra en varios lugares de Gran Bretaña con algunas condiciones: los lugares elegidos deben ser pueblos pequeños con pronunciadas y resbaladizas colinas.
¿En qué consiste?
La celebración consiste en dejar rodar un queso colina abajo y perseguirlo.
Un maestro de ceremonias que dirige la actividad lanza desde lo más alto de la colina un queso típico de la zona, el “Double Gloucester”, un queso no pasteurizado y semiduro. La competición consiste en correr a por él mientras rueda por la pendiente y la primera persona que agarre el queso gana. Se lleva la victoria y también el queso.
El Maestro de Ceremonias, inicia cada carrera con las frases usuales a toda voz de One to be ready, two to be steady, three to prepare and four to be off! (¡Uno, estén preparados; dos, cuiden su equilibrio; tres, listos y cuatro, corran!Cualquier persona puede participar. En el Festival del queso rodante se realizan varias carreras de distintas categorías, dependiendo del sexo y la edad, hasta cinco carreras cuesta abajo y una carrera cuesta arriba para los menores de 12 años.
En teoría los competidores intentan atrapar el queso, pero teniendo en cuenta que pesa cerca de 4 kg y puede alcanzar velocidades de más de 110 km/hora en una pendiente muy inclinada, es casi imposible conseguirlo, así que también gana quien esté más cerca de atraparlo y alcance la línea de meta.
Entre el desnivel, el barro y la hierba, mantenerse en pie es pura casualidad, por lo que la mayoría de participantes acaban rodando descontrolados como el queso. En la parte baja de la colina se ubican los cátcher, hombres corpulentos para detener a los participantes con exceso de velocidad, aunque eso no evita las numerosas caídas, fracturas, esguinces y choques entre los participantes, que acaban en accidentes, hospitalizaciones y lesiones graves.
Esta competición ha sido resumida como «twenty young men chasing a cheese off a cliff and tumbling 200 yards to the bottom, where they are scraped up by paramedics and packed off to hospital» (veinte jóvenes persiguiendo un queso por una colina y cayendo por 200 yardas al final, para ser recibidos por paramédicos que les trasladan al hospital). No solo hay que pillar al queso, sino que hay que sobrevivir también al trayecto. 😅
¡A la caza del queso! Peligros del Festival del queso Rodante
¿Y nadie se preocupa de que el queso no se lesione?
El queso que se utiliza en este singular Festival del queso rodante,es el mismo tipo que se empleaba desde sus inicios: un Doble Gloucester en forma de rueda, el cual puede tener hasta un peso aproximado de cuatro kilos. Actualmente, lo fabrica la quesera de la localidad Diana Smart y su hijo Rod, que son los encargados de suministrar oficialmente el queso para el concurso desde 1988.
Como medida de protección para el queso durante su recorrido por el difícil terreno y por los golpes que recibe, se le protege colocándole un borde con unas láminas de madera compacta, las cuales se adornan con unos lazos, de manera que llegue hasta el final del camino en una sola pieza. La familia Smart también lleva ruedas de quesos más pequeñas y dulces al evento para su venta y la cantidad recaudada también es parte del premio en metálico para el ganador.
Peligros del queso para los participantes
A veces es más peligroso el queso que la colina, ya que ha provocado en diversas ocasiones la mayoría de lesiones graves en la cabeza. Y es que cuando el Doble Gloucester rueda colina abajo, puede alcanzar velocidades comparadas con las de un vehículo en una autopista.
En 2013, con el fin de minimizar el riesgo de lesiones, se sustituyó el queso por una réplica de poliestireno, similar a los utilizados para producir los cascos de los ciclistas. Sin embargo, esta medida no fue bien recibida por los participantes porque alegaban que el nuevo material no proporcionaba la misma velocidad, así que al año siguiente volvieron a utilizar el tradicional queso Gloucester.
Récord del Festival de Queso Rodante
Según los registros oficiales del evento del Festival del queso rodante el deportista Chis Anderson, tiene el récord de haber conquistado en 22 ocasiones el máximo trofeo, de los cuales 11 años han sido de manera consecutiva. En segundo lugar está ubicado Shephen Gyde, quién tiene el récord de 20 triunfos.
Un dato curioso sobre los triunfos de Chis Anderson es que en realidad a él no le gusta el queso tipo Gloucester, por esa razón lo subasta y sus ingresos van a instituciones caritativas. Pues anda que para no gustarle el queso…😂
Historia del Festival del queso rodante
Se desconoce el origen exacto de la festividad por ahora, aunque hay dos teorías. La primera trata sobre el mantenimiento del derecho de pastoreo en la colina de Cooper, mientras que la segunda se refiere a una antigua fiesta pagana para conmemorar la llegada de la primavera, donde la gente arrojaba montones de matorrales ardientes colina abajo representando el fin del invierno. Esta creencia, parecida a las del May Day, es la razón por la que los maestros de ceremonia esparcirían bollos, galletas y dulces en la cima de la colina, para alentar los frutos de la cosecha.
En cualquier caso, las primeras referencias escritas de un evento de este tipo fueron a mediados del siglo XIX y la celebración se realizaba el lunes de Pentecostés, la celebración del Espíritu Santo que conmemora el final de final de la Pascua o Easter.
El evento adquirió fama a lo largo del siglo XX, primero entre los propios británicos y después a nivel internacional, por las caídas provocadas al intentar atrapar el queso.
Ni la ley ni la guerra han podido acabar con esta tradición. En la Segunda Guerra Mundial, debido al racionamiento de alimentos, el queso se sustituyó por un trozo de madera.
Pero además, el evento actualmente ya no cuenta con aprobación oficial debido a que el aumento del número de visitantes planteó preocupaciones por la seguridad. En algunas ediciones hubo más de 15 000 asistentes para un aforo de 5000 personas y las multitudes impedían el acceso de ambulancias que necesitaban transportar a los competidores heridos tras la carrera.
A los alrededores de Cooper’s Hill se leen diversos letreros que advierten del peligro del Festival del queso rodante. Sin embargo, pese a no contar con la supervisión o el apoyo de las autoridades, el ánimo de organizadores y participantes no ha disminuido para mantener viva esta tradición.
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